martes, 22 de mayo de 2012

INSTANTÁNEAS POÉTICAS DE CINE NEGRO


Este lunes Francisca Gata Amate, que ha vivido en tantos lugares que casi no los recuerda, ofreció un gran recital divido en dos partes. En la primera nos leyó parte de su último poemario, Cine Negro, un libro cargado de jazz y matones, de políticos corruptos y mujeres de conversación sincera en la barra de un bar oscuro. La poeta nos hizo trasladarnos con sus versos a otra época, a los primeros años del siglo XX, en donde la mafia y los trapicheos movían el mundo en Estados Unidos o en Sicilia.

Sicilia es una madre que pare enemigos de la sociedad, así comenzó su recital Gata Amate, con un poema en donde se ilustraba esa conexión mafiosa entre las dos orillas del mundo siciliano: la de la isla bañada por el Mediterráneo y la de las calles de San Francisco o Nueva York, en donde los hijos de la madre patria extendieron su redes. 


En esta primera parte, más cinematográfica y narrativa, las escenas de prostíbulos y comisarías se sucedían como los vasos de whisky en cualquier piano bar de los años 20, todo ello junto a amores imposibles y velados por el humo pesado y sórdido del tabaco negro. La banda sonora del poemario es el jazz, como no podía ser de otra forma, un jazz que acompaña a reuniones secretas, a tratos entre gansters y políticos, comprados con la sangre de otros gansters y políticos.

Por el contrario, la segunda parte del recital fue mucho social y más cruda. La poeta leyó dos poemas casi de denuncia. En uno de ellos, una joven rumana trataba de vender un anillo, no sabemos si el rubí era bueno, si la joya robaba, pero eso nada le importa al hombre mayor al que ella trata de vendérselo. Él sólo tiene ojos y dinero para otra joya, una joya que no está en venta (la virginidad de la chica) pero que él tratará de comprar.


La riqueza del ciclo de los 'Lunes Literarios' son las distintas voces que han pasado y pasarán por él, un buen ejemplo de ello fue el recital de este lunes, con una poesía alejada de los cánones más prestigiados, pero bañada del olor, el sabor y la música del mundo. Creo que todos los que ayer escuchamos a Francisca Gata Amate salimos con el corazón emborrachado de jazz y poesía.

Finalmente, recordar que la semana que viene la protagonista será otra poeta, Mari Cruz Agüera, que nos leerá parte de su obra poética, a partir de las 21.30 horas. 

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